II.- SAN ROMÁN
En el silencio de una calle casi sin asfaltar
Edisa y Lauren miran el tiempo pasar.
Tejados viejos, miradas viejas, paisajes viejos;
Un fantasma se pasea por la iglesia
y en el cementerio
se rezan mutuamente los muertos porque ya nadie viene a verlos.
Cerró el panadero, cerrará la tienda de Mercedes,
y la leche de las vacas en la ciudad tendrá que venderse.
Silencio.
Ruge el aire fiero reclamando miradas.
Ya nadie viene en verano.
Crecieron los niños, los nietos de los ancianos.
Ya nadie viene a verles, nadie.
San Román. Camino desierto de llanto
soledad, polvo y cansancio...
San Román...
Pilar Escamilla Fresco
(hace varios años)
viernes, 16 de agosto de 2013
San Román
Mañana comeré con mis fantasmas favoritos rodeada de telas de araña enormes y de los sonidos de los veranos de mi infancia. Creo que sobreviviré. No prometo nada, pero sé que será un día intensamente emotivo.
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