Alegoría de la pintura

 

[caption id="attachment_665" align="aligncenter" width="220" caption="Alegoría de la pintura"][/caption]

Recorro caminos de tierra seca y polvorienta;
levanto las piedras ardientes de día,
buscando tu sombra fugaz bajo ellas.
Palpita tu corazón bajo tus pechos
flameantes de sueños, ilusiones vanas, deseos
y reivindicaciones feministas.
Los años que te tocó luchar feroz con la vida
no hablaban del papel que representaste.
Pero casi cuatro siglos más tarde
idolatran tu pintura altamente cotizada.
Esos ojos profundos llenos de fuerza y brillo
lanzan mensajes a generaciones distantes
demostrando que el tesón y el trabajo,
la inteligencia y la vocación
pueden más que las malas lenguas y la traición.
Te lo robaron todo de niña
la infancia, la pureza, la inocencia;
te convirtieron en luchadora pintora,
superaste a padres y amantes
en el arte de la vida y en el del pincel.
Dejaste una herencia, mujer, de superación
y de guerra sin cuartel.
La eternidad llegó para ti al pintarte
mujer pintando con pincel en mano
y delantal manchado, Artemisia,
al pintarte pintando.

Pilar Escamilla Fresco