De Madrid a Zanzíbar, de Zanzíbar al cielo, rodeada de vidas cercanas

A todos... GRACIAS, GRACIAS, MUCHAS GRACIAS.

Gracias a Pablo, mi dulce Pablo, por ser mi equipo perfecto, mi par, mi apoyo, mi TODO.

Gracias a Daniel Hare por regalarnos su arte.

Gracias a Lydia Alcaraz por compartir sus versos y dárnoslos a conocer (¡qué gran descubrimiento!), Espero perdonaras quedarte sin audio accidentalmente. Lo intentamos solucionar ASAP, es decir, tan pronto como pudimos.

Gracias a Jorgeisson y a sus amigos, V de Madrid o como quiera que se llamen, por hacernos pasar un rato tan bueno, en todos los sentidos.
Gracias especiales a Jorge Valencia por estar a mi lado en el escenario, por cederme su talento musical, por seguir en mi vida tras más de 15 años de amistad. Por aguantarme incluso cuando estoy inaguantable.

Y GRACIAS a todos esos amigos de BookCrossing Spain que vinieron a acompañarme, no los nombro todos porque sólo ellos llenaron un tercio del local (¡me emocioné!).

Gracias a mis compañeras del extinto CINDOC (que en paz descanse ;-d) que tras tantos años siguen en mi vida Isakate.

Gracias a mis compañeras de la OVICAM que aunque estuve allí muy pocos meses siguen teniéndome en su vida.

Gracias a amigos de la poesía, Carlos Peñacoba, Poliana y muchos más que me dejo en el tintero.

Y muchas gracias desde lo más hondo de mi ser a mi prima Susi, Borja que ya le considero hace tiempo también primo, y a Carmen, porque la familia es muy importante, y aunque ayer recité cositas de la familia de mi madre, la de mi padre, mucho más numerosa y presente en Madrid, es la que vino a verme.

GRACIAS por llenar el local, amigos. Me sentí: QUERIDA, ARROPADA...En el cielo

Y gracias especiales a Esther Álvarez sin cuyo impulso cuando ella estaba montando el Ojalá 97 yo nunca hubiera recitado con música, ni conocido a Jorge Valencia ni a Agustín Alegre.

Agustín: te echamos mucho de menos. Prometemos más.

Y en último lugar, pero quizás el más importante, gracias a las hermanas Nuria y Raquel, las dueñas de Zanzíbar, por hacernos un hueco en su programación siempre que lo hemos pedido, por hacernos sentir como en casa en un local lleno de magia y encanto. GRACIAS