Ha caído en mis manos el segundo volumen de Aya de Yopougon, una novela gráfica preciosa sobre la vida de un grupo de amigas en Costa de Marfil. Llegando al final, he visto estas páginas que me han parecido tanto prácticas como preciosas. Espero que os gusten tanto como a mí y que os animen a leer el libro (hay dos volúmenes ya, que yo sepa, publicados en España).
Amigas, todas sabemos que no es fácil cuidar a un bebé, sobre todo cuando no se puede recurrir a ninguna amiga o niñera que se ocupe de él.
Como ayuda mientras hacéis las compras, el trabajo de casa o la comida, y si el bebé llora cuando se le deja solo (sobre todo si tiene un cólico), he aquí un consejo práctico.
Y es ATARSE EL BEBÉ A LA ESPALDA.
Del libro: Aya de Yopougon 2 / [guión], Marguerite Abouet ; [dibujo], Clément Oubrerie (ISBN 978-84-9847-531-9)
¡Qué curioso! De todas formas no sé si me atrevería =P
ResponderEliminarEn Youtube también podéis encontrar vídeos de cómo hacerlo... yo creo que es algo muy práctico.
ResponderEliminarOs dejo un enlace:
http://www.youtube.com/watch?v=gv04_UdR-b8
Un saludo.
Acá en México se utilizan rebozos, son menos anchos que esta imagen y muy prácticos.
ResponderEliminarYo lo he hecho sólo dos veces a lo largo de la vida de Sofz, y ha dado espléndidos resultados.
Mi abuela y mi tía me ayudaron en ambos casos, a sujetarlo bien, me parece que Sofía estaba muy calientita, podía sentir mi respiración y quizá los latidos de mi corazó, además de que al cantarle se quedó casi inmediatamente dormidita.